La compañía de Cupertino adelantaba el pasado mes de noviembre un servicio con anuncios, más barato, con el que pretendía atraer más suscriptores. Sin embargo, los resultados no están acompañando y la entidad no está cumpliendo con las garantías de audiencia hechas a los anunciantes, lo que les permite recuperar su dinero por anuncios que aún no se han publicado, según las informaciones de ‘Digiday’.
«Los informes sugieren que a algunos anunciantes se les han ofrecido reembolsos porque Netflix no ha entregado las cifras de audiencia esperadas», señalan desde AJ Bell.
El informe dado a conocer por ‘Digiday’ adelanta que Netflix se ha quedado corto en aproximadamente un 20% en términos de audiencia prometida, conforme a lo desvelado por ejecutivos de la empresa.
El nivel Básico de Netflix incluye un promedio de cuatro a cinco minutos de anuncios cada hora, pero no da a los usuarios la capacidad de descargar películas y series de televisión. Inicialmente, y debido a las restricciones de licencia, tan solo un número limitado de series de televisión y películas están disponibles, algo que ha decepcionado a los usuarios.
«A pesar de tener algunos programas de renombre que se han convertido en puntos de discusión más frescos en la oficina y en las redes sociales, como ‘Miércoles’ y el documental de ‘Harry y Meghan’, las tasas de registro en el nivel de suscripción dirigido por anuncios aparentemente no han estado a la altura«, añaden en AJ Bell.
Netflix decidió el lanzamiento de un servicio más barato y con publicidad después de perder suscriptores en los dos primeros trimestres de este año. La compañía tiene alrededor de 221 millones de suscriptores en todo el mundo, lo que la convierte en el servicio de transmisión más grande del mundo.
«El inversionista multimillonario Bill Ackman de Pershing Square se deshizo de la participación de su compañía en Netflix tan pronto como se anunció el plan de publicidad, diciendo que su modelo de negocio había cambiado debido a que los ingresos por publicidad eran impredecibles. Muchas personas se burlaron de Ackman después de que el precio de las acciones de Netflix se disparara, pero ahora no se ven tan inteligentes», analizan en AJ Bell.