El BCE es «demasiado alarmista» sobre los vínculos de las ‘criptos’ con la banca

El BCE es «demasiado alarmista» sobre los vínculos de las ‘criptos’ con la banca

Los mecanismos de prevención establecidos en el sector financiero en las últimas décadas ya cuentan con herramientas «para disminuir los riesgos sistémicos a los que alude el Banco Central Europeo como consecuencia de las interconexiones de los bancos con los criptoactivos», asegura el custodio de activos criptográficos. Y considera que se trata de un análisis demasiado alarmista “porque ya se han establecido mecanismos de prevención de riesgos tanto en Europa como en España”, apunta Enrique Palacios, CCO de Onyze.

En primer lugar, recuerda la plataforma de ‘criptos’ la ley pionera de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que regula la publicidad de inversión en activos digitales está protegiendo ya a los inversores, avisando constantemente de la naturaleza de estos activos. Pero además, Palacios señala los requisitos prudenciales establecidos por el Comité de Supervisión Bancaria de Basilea (CSBB) donde se distinguen los riesgos de los distintos tipos de criptoactivos para que puedan ser utilizados bien como activos de inversión o como cobertura en los productos financieros como futuros o fondos cotizados (ETF). Por lo tanto, «no tienen sentido las preocupaciones que destaca en su informe el BCE sobre posibles riesgos futuros en tanto que ya están siendo efectivamente prevenidos”, asevera.

El ecosistema de los tokens digitales avanza inexorablemente hacia una mayor regulación, una situación de la que las empresas son absolutamente conscientes y, de hecho, celebran que se implanten medidas de buenas prácticas y se haga cumplir la normativa contra prevención del blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo. De esta manera, subrayan desde Onyze, «nos convertimos en un signo de confianza sobre aquellos activos con los que se trabaja y se garantiza la protección al consumidor».

El sector en su conjunto entiende que las autoridades tomen con cautela los pasos de un ecosistema que aún es desconocido para ellos y, por lo tanto, primero el presidente de EEUU, Joe Biden, y, ahora, el BCE urjan al desarrollo de la regulación específica públicamente. Menos bien sienta que estos avisos se pasen de frenada o que se intente intervenir verbalmente en los trabajos que lleva a cabo el Parlamento Europeo en el desarrollo de la ley de mercados en criptoactivos (MiCA por sus siglas en inglés), como se desprende de las declaraciones de la presidenta del banco central, Christine Lagarde, de esta misma semana, cuando dijo que las criptomonedas «no valen nada» y «no se basan en nada».

«El hecho de que ella quiera que se regulen puede haber tenido un cierto impacto en el estado de ánimo de los operadores del mercado de las criptomonedas», argumenta Ipek Ozkardeskaya, analista de Swissquote. No es la primera vez que hay un ataque. Hace poco, el miembro del Comité Ejecutivo del Banco Central Europeo Fabio Panetta dijo que el mercado sigue sien el salvaje oeste. Y pese a que el supervisor bancario no tiene responsabilidad directa sobre los trabajos de los europarlamentarios, la impresión general es que sus palabras podrían predisponer a una menor benevolencia por parte de las comisiones de la cámara europea que se hallan desarrollando MiCA.

BOLSA