Desde la entidad consideran que «la recuperación del apetito por el riesgo en los mercados financieros ante las expectativas de un endurecimiento monetario menos agresivo, un dólar estadounidense más débil y unos sólidos fundamentos específicos de cada clase de activo han conformado un panorama menos desalentador para las criptomonedas«.
No obstante, creen que el mercado de las criptomonedas sigue pareciendo incapaz de aprender de los errores del pasado, por lo que, en su opinión, «será necesaria una mayor regulación para restaurar la confianza perdida».
Como explican en un reciente análisis, el fiasco de FTX en noviembre desató una avalancha de escepticismo sobre la gestión de los depósitos y reservas de los clientes por parte de los CEX.
Binance ha reconocido recientemente que había utilizado erróneamente su monedero ‘Binance 8’ para el almacenamiento de fondos de clientes de la bolsa y para la garantía de varios de los tokens que emiten. «Como ha demostrado el fiasco de FTX, la segregación de activos es imprescindible, una norma que las instituciones financieras tradicionales, como los gestores de activos o los bancos, ya siguen desde hace décadas».
¿Por qué Binance necesitaría garantías para sus propios tokens? Se preguntan en Julius Baer. «Porque cuando Binance quiere llevar un token no nativo, por ejemplo Ethereum, a su propia blockchain (Binance Smart Chain), necesita emitir un token sintético del mismo mientras bloquea el token original en la blockchain de Ethereum», responden.
Señalan que, aunque se trata de una práctica habitual en el ámbito de los activos digitales, «estos activos de reserva deberían mantenerse siempre independientes de los activos de los clientes». «Sucesos como este demuestran que el ecosistema de las criptomonedas tiene mucho margen para crecer en términos de cumplimiento y prácticas legales y que las recientes ganancias no deben considerarse el punto de partida de una recuperación rápida y duradera de la clase de activos».
«La mancha que el fiasco del FTX ha dejado en los CEX no ha desaparecido. Por lo tanto, reiteramos nuestra valoración de que se necesitará más regulación para restaurar la confianza perdida en las criptomonedas, lo que finalmente conducirá a la igualdad de condiciones entre el mundo de las criptomonedas y el de las finanzas«, concluyen.