«Los mercados están menos enfocados en los inventarios generales y más en el panorama global. A nivel mundial, el enfoque es China y ese será el macro impulsor del petróleo crudo durante el primer trimestre”, destaca Brian Kessens, gerente de cartera de Tortoise, en declaraciones recogidas por ‘Bloomberg’.
El gigante asiático eliminó este fin de semana definitivamente las cuarentenas a los viajeros que llegan al país, lo que supone el fin a la política ‘cero-Covid’ que había mantenido desde el inicio de la pandemia. Esta reapertura parcial ha movido al alza el mercado de crudo, a pesar de otros factores como un inventario estadounidense por encima de lo esperado.
«Habiendo tenido un mal comienzo de año, los precios del petróleo crudo están recuperando lentamente parte del terreno perdido la semana pasada, con precios subiendo a pesar de que los últimos datos de inventario del Instituto Americano del Petróleo muestran una acumulación inesperadamente grande de 14,9 millones de barriles«, destaca Michael Hewson jefe de análisis de CMC Markets.
Hewson recuerda que «las expectativas eran de una caída en el inventario de la Administración de Información Energética de hoy, que también muestra una gran acumulación de 18,96 millones de barriles«.
Además, la Administración de Información Energética prevé que se mantenga la tendencia al alza en los precios, y pronostica que «el precio del crudo Brent (el punto de referencia mundial) aumentará de un promedio de 81 dólares por barril en diciembre de 2022 a un promedio de 83 dólares por barril en el primer trimestre de 2023«.
«Pronosticamos que el precio del Brent se mantendrá relativamente estable durante el segundo trimestre de 2023, con un promedio de 85 dólares por barril, y luego disminuirá hasta fines de 2024″, agregan.
Según este pronóstico, el el precio del West Texas Intermediate, de referencia de EE.UU, seguirá un camino «similar», con un promedio de 77 dólares por barril en 2023, que bajará hasta los 72 dólares en 2024.