La compañía deslizó la prohibición en una actualización de sus Términos de Licencia Universal para Servicios Online que entró en vigor el 1 de diciembre. Ese documento cubre cualquier «servicio alojado por Microsoft al que el cliente se suscriba en virtud de un contrato de licencia por volumen de Microsoft» y se refiere principalmente a Azure, su plataforma de servicios ‘cloud’.
“Política de uso aceptable actualizada para aclarar que la minería de criptomoneda está prohibida sin la aprobación previa de Microsoft”, señaló la compañía radicada en Redmond. Asimismo, Microsoft subrayó que “ni el cliente, ni aquellos que accedan a un servicio online a través del cliente, pueden utilizar un servicio ‘online’ para minar criptodivisas sin la aprobación previa por escrito de Microsoft”.
En declaraciones al medio ‘The Register’, el gigante tecnológico reconoció que “la minería de criptomonedas puede causar interrupciones o incluso perjudicar a los servicios ‘online’ y a sus usuarios y a menudo puede estar vinculada a ataques de fraude y abuso cibernéticos, como el acceso no autorizado y el uso de los recursos del cliente”.
“Hicimos este cambio para proteger aún más a nuestros clientes y mitigar el riesgo de interrumpir o perjudicar los servicios en la nube de Microsoft”, añadieron.
Microsoft no es el único que prohíbe la minería de criptomonedas en la nube sin un permiso explícito. Google Cloud, por ejemplo, también lo prohíbe sin aprobación por escrito, al igual que Digital Ocean, mientras que Oracle y OVH no lo permiten en ninguna forma. Amazon Web Services, por su parte, no lo permite en su nivel gratuito.
Según algunos informes, los sistemas de computación en nube de Microsoft han sufrido una notable escasez de capacidad en los últimos años debido a las continuas limitaciones de la cadena de suministro. Al parecer, se espera que más de media docena de centros de datos Azure sigan limitados hasta principios de 2023.