El comportamiento negativo de las últimas horas se ha dado como reacción a la publicación de los resultados de la plataforma de monedas digitales, que ha perdido más de mil millones de dólares de abril a junio. Los ingresos de Coinbase disminuyeron casi un 64%, ya que los inversores abandonaron el mercado de las criptomonedas tras el espectacular rally alcista del año pasado. Los ingresos por transacciones minoristas fueron de 616,2 millones de dólares, un 66% menos. A pesar de ello, los títulos de la plataforma de criptos ha subido un 7,37% en el mercado.
No ha sido la única noticia negativa. Nuri, un banco de criptomonedas alemán de nueva creación con 500.000 clientes, presentó una solicitud de insolvencia el 9 de agosto, citando ventas masivas de criptodivisas, la insolvencia de Celsius y otros fondos de criptomonedas a principios de este año como algunas de las causas que les indujeron a tomar esta medida, según fuentes de ‘CoinTelegraph’. Por otra parte, la plataforma de negociación y préstamo de criptomonedas Hodlnaut ha decidido suspender todas las retiradas de fondos e intercambios de tokens como consecuencia de las condiciones recientes en los mercados, según ha informado la empresa.
Sin embargo, los expertos destacan la resiliencia de las criptos ante las noticias negativas. En cambio, cualquier esperanza de que la política monetaria de EEUU pueda ser menos contundente, fruto de la bajada de la inflación, da alas a estos activos. «Por extraño que parezca, el bitcoin ha demostrado ser muy resistente últimamente, recuperándose más rápidamente y no pareciendo inmutarse por los contratiempos», indica Craig Erlam, analista de Oanda. «Será interesante ver cómo aprovecha un informe favorable. Hemos visto cómo se desvanecía el impulso en la carrera hacia los 25.000 dólares, pero una cifra de inflación más suave podría ser justo el catalizador que el bitcoin necesita para darle la vuelta», añade.