Esto se traduce en un beneficio por acción (BPA) de 0,33 dólares, un 18% por debajo de los 0,40 dólares por título registrados entre abril y junio de 2024. Además, el BPA ajustado ha sido de 0,40 dólares, inferior a las previsiones de consenso, que anticipaban 0,43 dólares por acción.

El fabricante de vehículos estadounidense también se ha quedado por debajo de las expectativas del mercado con su facturación, que ha caído un 12% desde el mismo periodo de 2024, para alcanzar los 22.496 millones, mientras que el consenso de analistas esperaba 22.740 millones de dólares.

Los ingresos procedentes del negocio de automóviles han retrocedido un 16% desde el segundo trimestre de 2024, hasta los 16.661 millones, y la facturación del segmento de energía ha caído 7%, para aportar 2.789 millones al total. Los 3.046 millones restantes corresponden a «servicios y otros ingresos», una partida que ha deparado una mejora interanual del 17%.

«El segundo trimestre de 2025 marcó un hito en la historia de Tesla: el inicio de nuestra transición, pasando de liderar las industrias de vehículos eléctricos y energías renovables a convertirnos también en líderes en IA, robótica y servicios relacionados. Nuestro primer servicio de Robotaxi se lanzó en Austin en junio. Si bien el servicio tiene un alcance inicial limitado, creemos que nuestro enfoque de autonomía nos permite mejorar continuamente la seguridad, escalar rápidamente la red y aumentar la rentabilidad», explica Tesla.

El fabricante estadounidense sigue «ampliando» su oferta de vehículos, incluyendo las primeras versiones de un modelo más asequible en junio, con producción en serie prevista para el segundo semestre de 2025.

«Además, continuamos el desarrollo de los modelos Semi y Cybercab, ambos con producción en serie prevista para 2026″, agrega.

Sobre el robotaxi, asegura que seguirá «mejorando y ampliando el servicio», con «más vehículos que cubrirán un área más extensa, eventualmente sin un conductor de seguridad«, mientras realiza «pruebas en otras ciudades de EEUU en previsión de futuros lanzamientos».

«Nuestros esfuerzos para perfeccionar la oferta de robotaxi en Austin no se limitan a una ubicación específica y nos permitirán escalar rápidamente a otras ciudades con una inversión mínima. Logramos la primera entrega autónoma del mundo a un cliente con un nuevo Model Y de producción que se condujo solo unos 30 minutos desde la fábrica al otro lado de la ciudad hasta la casa de su nuevo propietario, incluso en autopistas», indica.

De cara al futuro, señala que «es difícil medir el impacto de los cambios en las políticas comerciales y fiscales globales sobre las cadenas de suministro de la automoción y la energía, la estructura de costes y la demanda de bienes duraderos y servicios relacionados».

«Si bien estamos realizando inversiones prudentes que impulsarán el crecimiento de nuestros negocios de vehículos y energía, los resultados reales dependerán de diversos factores, como el entorno macroeconómico general, el ritmo de aceleración de nuestros esfuerzos de autonomía y el aumento de la producción en nuestras fábricas», concluye.

Por tradeo