Sus cifras se traducen en un beneficio por acción (BPA) de 1,30 dólares, un 61% por encima de los 1,08 dólares por título de hace un año. Por su parte, el BPA ajustado ha sido de 1,30 dólares, por encima de las previsiones de 1,25 dólares por título.
La compañía también ha mejorado previsiones con sus ingresos, que han crecido un 62% en la comparativa interanual y han alcanzado los 57.006 millones, frente a previsiones de 54.920 millones. La mayor parte de esta facturación procede de los centros de datos, que han aportado 51.215 millones (+66%). La segunda partida más destacada, la de videojuegos, ha sumado 4.265 millones.
«Los ingresos del centro de datos en el tercer trimestre alcanzaron un récord de 51.215 millones de dólares, un 66% más que el año anterior y un 25% más que el trimestre anterior, impulsados por tres cambios en la plataforma: computación acelerada, potentes modelos de IA y aplicaciones con agentes. Blackwell Ultra es ahora nuestra arquitectura líder en todas las categorías de clientes, mientras que nuestra arquitectura Blackwell anterior experimentó una demanda sólida y continua. Las ventas de H2O fueron insignificantes en el tercer trimestre», explica la empresa.
Por su parte, el margen bruto ha sido del 73,4%, 1,2 puntos porcentuales por debajo del 74,6% registrado en el mismo periodo del curso pasado.
La firma explica que «los márgenes brutos del tercer trimestre disminuyeron con respecto al año anterior debido a la transición de nuestro modelo de negocio, pasando de ofrecer sistemas Hopper HGX a soluciones integrales para centros de datos de Blackwell».
De cara al próximo trimestre, Nvidia anticipa unos ingresos de 65.000 millones, por encima de los 61.600 anticipados por el consenso de analistas.
Nvidia pagará su próximo dividendo trimestral en efectivo, de 0,01 dólares por acción, el 26 de diciembre a todos los accionistas registrados el 4 de diciembre.
Jensen Huang, fundador y CEO de Nvidia, destaca que «las ventas de Blackwell se han disparado y las GPU para la nube están agotadas».
«La demanda de computación sigue acelerándose y multiplicándose tanto en entrenamiento como en inferencia, creciendo exponencialmente en ambos casos. Hemos entrado en el círculo virtuoso de la IA. El ecosistema de IA está escalando rápidamente, con más creadores de modelos básicos, más startups de IA, en más sectores y en más países. La IA está presente en todas partes, haciendo de todo, simultáneamente», ha concluido.
