El organismo volvió a bajar los tipos de interés en 25 puntos básicos, hasta situarlos en el 2%. Una decisión que se consideró justificada » para proteger la meta de inflación a medio plazo después de 2026, en un entorno en el que la inflación se encontraba actualmente en el objetivo, pero se proyectaba que se situaría por debajo de él temporalmente».

Además, la reducción propuesta de los tipos de interés oficiales «debería considerarse como un intento de proteger la proyección del 2% para 2027» y «debería garantizar que la inflación general, temporalmente por debajo del objetivo, no se prolongara, en un contexto en el que se esperaba una mayor desinflación en las medidas subyacentes, las perspectivas de crecimiento seguían siendo relativamente débiles y la capacidad disponible en el sector manufacturero hacía improbable que un crecimiento ligeramente más rápido se tradujera en presiones inflacionarias inmediatas».

Las actas del BCE también recogen que el recorte mantendría al Consejo de Gobierno «bien posicionado para afrontar la elevada incertidumbre que se avecinaba, a la vez que ofrecería plena opción en futuras reuniones para gestionar los riesgos de inflación bilaterales en una amplia gama de escenarios».

Por el contrario, se consideró que mantener los tipos de interés en sus niveles actuales «podría aumentar el riesgo de no alcanzar el objetivo de inflación en 2026 y 2027».

—ampliando—

Por tradeo