Además, registró unos ingresos de 30.688 millones de dólares, en comparación los 30.406 millones de hace un año.
Durante el primer semestre, generó un flujo de caja libre de 2.000 millones de dólares, lo que respalda la previsión anual de entre 3.000 y 4.000 millones de dólares.
En el segundo trimestre, Delta registró ingresos ajustados de casi 15.510 millones de dólares, un 1% más que el año anterior. Sus ingresos netos en el trimestre finalizado el 30 de junio ascendieron a 2.130 millones de dólares, un 63% más que en el mismo período del año anterior.
«En el trimestre acabado en junio, Delta registró ingresos récord con un margen operativo del 13%, generando 1.800 millones de dólares en ganancias antes de impuestos y liderando a sus competidores en la red en métricas operativas clave», afirma Ed Bastian, director ejecutivo de la compañía.
Como ha añadido, de cara a la segunda mitad del año, «seguimos centrados en ejecutar nuestras prioridades estratégicas y gestionar los recursos a nuestro alcance para obtener sólidas ganancias y un flujo de caja sólido. Como reflejo de nuestra confianza en el negocio, estamos renovando nuestras previsiones financieras«.
Así, Delta restableció su pronóstico para todo el año, que había suspendido tras su informe del primer trimestre. La aerolínea ahora espera ganancias de entre 5,25 y 6,25 dólares por acción, con un flujo de caja libre de entre 3.000 y 4.000 millones de dólares, «en consonancia con nuestros objetivos de flujo de caja libre a largo plazo», señala Bastian .
Mientras, para el trimestre acabado en septiembre, «prevemos que los ingresos totales se mantengan estables o incluso aumenten un 4% en comparación con el año anterior, y se espera que las tendencias de ingresos unitarios mejoren durante la segunda mitad del año a medida que continuamos ajustando la capacidad y la industria racionaliza aún más la oferta», expresa, por su parte, Glen Hauenstein , presidente de Delta.