«Fue una decisión tremendamente difícil, pero creemos que es la correcta dadas las condiciones actuales del mercado”, ha dicho Stephen Ehrlich, director ejecutivo de Voyager Digital.
Erlich también ha señalado que han tomado esta decisión para darle a la firma tiempo adicional y, que de esta forma, pueda continuar “explorando alternativas estratégicas con varias partes interesadas”. Asimismo, ha señalado que brindarán información adicional en “el momento apropiado”.
El anuncio de Voyager Digital se ha producido en medio de una serie de incumplimientos en todo el sector del mercado de las criptomonedas.
La noticia ha llegado unos días después de que Three Arrows Capital, uno de los clientes de Voyager, no cumpliera con los pagos de un préstamo de más de 670 millones de dólares.
Voyager Digital fue la encargada de emitir un aviso a través del cual indicaba que el fondo no había pagado un préstamo de 350 millones de dólares y 15.250 bitcoin, por un valor de alrededor de 323 millones de dólares, según el mercado actual. En consecuencia, Three Arrows Capital entró suspensión de pagos.
La semana pasada, Alameda se comprometió a dar 500 millones de dólares para financiar a Voyager, y la empresa ya ha retirado 75 millones de dólares de esa línea de crédito, pero parece que no ha sido suficiente para mantener el funcionamiento de la empresa.
La decisión de Voyager Digital sigue la estela de Celsius, prestamista de criptomonedas, que también pausó los retiros para sus clientes en junio. Celsius congeló repentinamente los retiros en las primeras horas del lunes 13, junto con los intercambios y las transferencias. Esta decisión vino acompañada de informes que sugieren que la compañía está contratando abogados de reestructuración debido a los crecientes problemas financieros.
El colapso del mercado de las criptomonedas se debe al descenso de la liquidez en los mercados globales por las subidas de tipos y al quantitative tightening (QT) de la Reserva Federal de EEUU (Fed). El dinero fácil de la Fed bombeó las subidas de los mercados globales y las criptomonedas en los últimos dos años, pero lo contrario ha significado que los inversores se vean obligados a deshacer sus posiciones, especialmente en los activos de riesgo.