«Incluso si Estados Unidos continúa imponiendo aranceles más altos, ya no tendrá sentido económico y se convertirá en una broma en la historia de la economía mundial«, ha informado la Comisión de Aranceles Aduaneros del Consejo de Estado en un comunicado.

«Dado que ya no existe ninguna posibilidad de aceptación en el mercado para los productos estadounidenses exportados a China bajo los niveles arancelarios actuales, si la parte estadounidense continúa imponiendo aranceles a los productos chinos exportados a EEUU, la parte china no les prestará atención», ha agregado.

Con la subida de este viernes, los índices neoyorquinos finalizan una semana de compras, que ha sido además muy volátil, con ganancias del 4,95% para el Dow Jones y avances del 5,70% y del 7,29% para el S&P 500 y el Nasdaq, respectivamente.

En este sentido, los expertos de Link Securities comentan que «el hecho de que la relación comercial entre EEUU y China, las dos principales economías del mundo, esté completamente rota -aranceles ridículos, cercanos o superiores al 100%, hacen inviable o extremadamente complejo el comercio entre ambos países-, deja abiertas muchas incógnitas, manteniendo la incertidumbre sobre el potencial impacto que todo ello puede terminar teniendo en las cadenas de suministros, en la inflación y en el crecimiento económico global».

Todo esto también está provocando una gran tensión en el mercado de bonos. «El hecho de que la volatilidad se extienda a los mercados de bonos gubernamentales no es una buena noticia, ya que afecta a los sectores del mercado que usted (como gobierno) desea mantener seguros, como los fondos de pensiones, por ejemplo. Por lo tanto, creo que si la marcha atrás de Trump no calma los nervios de los inversores en bonos, la Fed será la siguiente en intervenir«, indica Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank.

Ante estas preocupaciones, la presidenta de la Reserva Federal (Fed) de Boston, Susan Collins, ha asegurado este viernes que el banco central se encuentra «absolutamente preparado» para intervenir en el mercado si este requiere una estabilización.

«Hemos tenido que desplegar diversas herramientas con bastante rapidez. Estaríamos absolutamente preparados para hacerlo según sea necesario«, ha señalado.

ARRANCA LA TEMPORADA DE RESULTADOS

En el plano empresarial, este viernes ha comenzado la temporada de resultados del primer trimestre con las cuentas de los grandes bancos como Wells Fargo, JP Morgan, BlackRock o Morgan Stanley.

JP Morgan Chase ha superado las expectativas. En el primer trimestre del año, la entidad ha ganado 14.600 millones de dólares, un 9% más. Su presidente y consejero delegado, Jamie Dimon, ha avisado de que la economía estadounidense se enfrenta a «turbulencias considerables».

Wells Fargo también ha batido previsiones con sus resultados del primer trimestre del año, un periodo en el que la entidad ha obtenido un beneficio neto de 4.894 millones de dólares, lo que supone un incremento del 5,95% en comparación con los 4.619 millones de dólares registrados hasta marzo del año pasado.

Del mismo modo, las cifras de BlackRock cumplen con las expectativas del mercado, aunque Larry Fink, consejero delegado y presidente de la firma, ha lanzado una advertencia ante la «incertidumbre y ansiedad sobre el futuro de los mercados y la economía están dominando las conversaciones con los clientes» y compara la situación actual con la crisis financiera de 2008 o la pandemia de Covid-19.

El beneficio neto de Morgan Stanley ha alcanzado los 4.300 millones de dólares en el primer trimestre en comparación con los 3.400 millones registrados en el mismo período del año anterior, superando las expectativas de los analistas de Wall Street.

REFERENCIAS DESTACADAS

Desde el punto de vista macro, la agenda también ha incorporado referencias destacadas como los precios de producción de marzo, que han sorprendido a la baja con una caída al 2,7%. Aunque el mercado se ha centrado en las expectativas de inflación a 12 meses que recoge la Universidad de Michigan en su sondeo sobre la confianza del consumidor, que se han disparado hasta máximos de 1981.

«La confianza de la Universidad de Michigan es muy importante porque fue el primer indicador adelantado americano que el 14 de marzo mostró un fuerte debilitamiento (57,9 desde 64,7, pero después revisado a la baja hasta 57,0) y con repuntes serios de sus componentes de expectativas de inflación a 5 años (+3,9%, revisado después hasta +4,1%) y a 1 año (+4,9%, también revisado después hasta +5,0%)», afirman en Bankinter.

ANÁLISIS TÉCNICO DEL DOW JONES

El Dow Jones se ha dejado cerca de un 20% desde que dibujara los máximos históricos a comienzos del mes de febrero. Las últimas fuertes caídas le han llevado a abandonar la media de 200 sesiones, confirmando un cambio de tendencia. «Las últimas subidas corresponden sólo a un rebote y es que, para confirmar una señal de fortaleza, deberíamos esperar a la superación de la resistencia de los 42.821 puntos. Un cierre por encima de este nivel de precios supondría una mejora sustancial de sus perspectivas técnicas, y es que devolvería al índice a la senda alcista», valora César Nuez, analista de ‘Bolsamanía’.

«Por debajo, el soporte clave se encuentra en los 36.611 puntos, mínimos de este pasado lunes. Ojo que el abandono de este nivel de precios sería una muy mala señal que nos haría pensar en un cambio de tendencia», agrega.

OTROS MERCADOS

En otros mercados, el petróleo West Texas ha subido un 2,73% ($61,72) y el Brent ha trepado un 2,56% ($64,96). Por su parte, el euro se ha apreciado un 1,22% ($1,1334), y la onza de oro ha ganado un 2,19% ($3.247).

Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años se ha revalorizado al 4,472% y el bitcoin ha sumado un 5,21% ($83.652).

Por tradeo