Top 3 inversores de criptomonedas que apostaron arriesgadamente y ganaron a lo grande

A lo largo de los años, las criptomonedas se han convertido lentamente en mainstream, con cada institución e inversor ansioso por aprovechar su promesa de grandes fortunas. Sin embargo, no siempre fue así.

Algunas personas vieron el potencial en los criptoactivos cuando la mayoría los descartaba como modas especulativas. Al apostar en grande, a veces todo lo que tenían, estos primeros adoptantes transformaron sus vidas, convirtiendo pequeñas inversiones en millones. Hoy en día, sus historias de éxito en criptomonedas son una poderosa evidencia de su fe temprana en la industria.

Erik Finman

Erik Finman es el millonario de Bitcoin (BTC) más joven del mundo. En 2011, con solo 12 años, tomó una decisión que cambiaría su vida. Invirtió un regalo de 1,000 dólares de su abuela, destinado a su educación universitaria, en Bitcoin. Esta inversión temprana lo convertiría en millonario.

Finman se encontró por primera vez con Bitcoin en una protesta, donde notó a un hombre con una camiseta de Bitcoin. Intrigado, se acercó al hombre y le preguntó sobre la criptomoneda:

“Es como un hippie, dice, ‘Hombre, creo que va a acabar con Wall Street, toda la corrupción y todas las cosas malas’”, Finman recordó. 

Esto despertó su curiosidad, y pronto comenzó a investigar sobre Bitcoin y decidió invertir. Frustrado con la educación tradicional y los maestros, abandonó la escuela secundaria cuando tenía 15 años. A finales de 2013, cuando el precio de Bitcoin alcanzó 1,200 dólares por moneda, Finman vendió 100,000 dólares en Bitcoin.

Con su nueva riqueza, Finman lanzó Botangle a principios de 2014. Botangle era una plataforma de educación en línea inspirada en su desdén por la educación convencional y que ofrecía una alternativa a ella. En 2015, Finman vendió Botangle por 300 Bitcoins.

Pero no se detuvo allí. El joven inversor en Bitcoin hizo una apuesta con sus padres: si se convertía en millonario antes de cumplir 18 años, no lo obligarían a asistir a la universidad. Para 2017, Finman había cumplido esa apuesta.

El valor de Bitcoin había aumentado a alrededor de 2,700 dólares por moneda, y las holdings de Finman, que totalizaban 403 BTC, lo hicieron millonario a los 18 años, tal como había prometido. Después de convertirse en millonario de Bitcoin, Finman lanzó varias empresas exitosas. Fundó MetalPay y CoinBits, una startup de inversión en criptomonedas. 

Además, creó FINFund, un fondo de capital de riesgo enfocado en tecnologías disruptivas. Además, Finman estableció un comité de acción política, Future PAC:

“A la edad de 25 años: abandoné la escuela y me mudé a SF. Vendí mi primera startup. Hice mi primer millón en Bitcoin. Creé un traje funcional de Dr. Octopus. Lanzamos un satélite. Lanzamos una startup de criptomonedas multimillonaria. La Generación Z lo logra,” Finman escribió en X.

Glauber Contessoto

Glauber Contessoto, apodado el “SlumDoge Millionaire,” personifica la apuesta de alto riesgo de invertir en memecoins. Nacido en Brasil y criado en la pobreza después de mudarse a Estados Unidos, Contessoto trabajó en una compañía de música y incursionó en acciones antes de conocer Dogecoin (DOGE) en Reddit. 

Inspirado por Elon Musk, Contessoto decidió tomar un gran riesgo. Gastó todos sus ahorros de vida, vendió su cartera de acciones y tomó un préstamo de margen en la aplicación Robinhood para invertir 250,000 dólares en Dogecoin (DOGE) en febrero de 2021.

Su momento fue impecable. Los tuits de Musk hicieron que el precio de Dogecoin se disparara. En un momento, las holdings de Contessoto valían alrededor de 3 millones de dólares:

“Ok, solo voy a decir esto. Creo que soy el primer millonario de Dogecoin de 2021. Ocurrió oficialmente ayer 15 de abril de 2021 a las 6pm PST,” Contessoto compartió en 2021.

Sin embargo, esta fortuna no duró mucho. A medida que los precios de DOGE cayeron, también lo hizo su riqueza.

No obstante, las pérdidas no realizadas no son pérdidas hasta que se venden. En 2024, recuperó su estatus de millonario:

“La gente se rió cuando dije que DOGE estaba regresando. Pero nunca vendí, solo compré más. Actualmente tengo 1.2 millones de dólares en DOGE,” publicó.

Su historia de éxito de pasar de la pobreza a millones sigue siendo uno de los relatos más dramáticos de la cripto de la pobreza a la riqueza.

Lea Thompson

Lea Thompson, también conocida como “Girl Gone Crypto,” fue introducida por primera vez a la criptomoneda después de ver a un amigo minar monedas digitales. Recibió un pago en cripto por un proyecto y también comenzó a hacer inversiones mensuales entre 500 y 1,000 dólares en Bitcoin y Ethereum.

Su exposición temprana dio frutos durante el mercado alcista de 2017 cuando el valor de Bitcoin se disparó:

“Pude experimentar ese gran mercado alcista de 2017. Y fue tan emocionante ver – el Bitcoin que había comprado subió a 20,000 dólares,” dijo.

Las ganancias de sus inversiones le brindaron a Thompson la oportunidad de dejar su trabajo y hacer la transición a una carrera a tiempo completo como creadora de contenido cripto. Ahora utiliza su plataforma, Girl Gone Crypto, para compartir contenido educativo sobre el mundo de las criptomonedas. 

Thompson ha construido un gran seguimiento en línea, con alrededor de 243,000 seguidores en X, 43,000 seguidores en Instagram y 16,800 suscriptores en YouTube.

Su historia es significativa no solo por su adopción temprana de cripto y éxito, sino también por su papel como mujer en una industria tradicionalmente dominada por hombres. La evolución de Thompson de observadora casual a influyente exitosa ilustra cómo el momento, la curiosidad y el compromiso con la comunidad pueden llevar a un éxito notable en el espacio cripto.

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