«Alemania se enfrenta a las elecciones más importantes de su historia reciente«, asegura este experto. Y, «salvo sorpresa mayúscula, la CDU/CSU será probablemente la encargada de formar la próxima coalición de gobierno, pero sigue sin estar claro quién participará en estas conversaciones, lo que genera incertidumbre en torno a cuestiones como la continuidad del apoyo a Ucrania y la transición verde».

En su opinión, «el éxito relativo de la AfD y los posibles problemas del SPD serán clave para determinar lo que vendrá después. Con todos los partidos principales descartando la colaboración con la AfD, es probable que nos enfrentemos a unas negociaciones de coalición prolongadas, o a una coalición engorrosa incapaz de alcanzar un consenso«.

Para Lewis Grant, «si el consenso puede alcanzarse a tiempo y surge un gobierno capaz de actuar, una agenda política liderada por la CDU- debería ser bien recibida por los mercados de renta variable».

Si esto se consigue, prevé «un programa favorable a las empresas, centrado en la desregulación y la reducción de los tipos impositivos».

Por otra parte, afirma que «la CDU no apoya muchas iniciativas recientes centradas en la energía verde y el clima, como los sistemas de calefacción doméstica con bajas emisiones de carbono, aunque el grado en que reviertan los avances logrados por Alemania dependerá de sus socios de coalición. Los inversores centrados en ESG esperan que el Partido Verde esté bien representado en la coalición gobernante».

¿Y SI HAY UN RESULTADO INESPERADO?

¿Y qué puede ocurrir si hay un resultado inesperado? «La falta de consenso tras las elecciones del fin de semana, o un resultado inesperado en el que la CDU no forme parte de la coalición gobernante, es probable que provoque una huida hacia la seguridad y beneficie a las áreas defensivas de alta calidad del mercado», argumenta Lewis Grant.

Según su análisis, «la confianza de los inversores ha crecido en las últimas semanas, con la CDU a la cabeza de las encuestas, aunque observamos que la confianza ha aumentado desde una base baja y hay poco optimismo en una verdadera reactivación económica, simplemente esperanzas de que la desaceleración pueda frenarse por sí misma».

Así, considera que «la fuerza de la coalición determinará si se pueden promulgar cambios significativos en el mecanismo de freno de la deuda para proporcionar el tan necesario estímulo».

En conclusión, Lewis Grant afirma que «quien quiera que forme la próxima coalición, tiene ante sí una ardua tarea ante las ondas geopolíticas que emanan en gran medida de Estados Unidos, el debilitamiento de la demanda en China y el mantenimiento de los elevados precios de la energía».

Por tradeo