La compañía se mantiene cotizando en las inmediaciones de los máximos históricos, si bien en las últimas sesiones se está tomando un merecido descanso. No creemos que la corrección del corto plazo se extienda por debajo del soporte de los 38 euros, y todo parece indicarnos que podríamos ver una señal de fortaleza que nos muestre la continuación de su tendencia alcista principal. No creemos que sea una locura acabar viendo los 50 euros en las próximas semanas.
El pasado mes de agosto pudimos ver que Repsol conseguía sujetarse en las inmediaciones de la media de 200 sesiones tras una corrección del 25% durante buena parte del mes junio y julio. Hace unas sesiones pudimos ver la rotura de la resistencia de los 12,62 euros, lo que nos muestra la fortaleza del medio y largo plazo de la compañía. Las caídas de las últimas sesiones no hacen más que dar forma a un throw back a este nivel de precios. Lo más normal, a medio y largo plazo, es que acabemos viendo un ataque al nivel de los 13,81 euros y una extensión de las subidas hasta los máximos históricos que dibujara en los 15,84 euros.
Telefónica lleva dos meses de fuertes descensos. Estas caídas le han llevado a perder la media de 200 sesiones. No obstante, por estos precios se encuentra el soporte clave de los 4 euros, precios en donde confluye la directriz alcista proyectada desde los mínimos de 2020. Estos precios ofrecen una destacada banda de soporte, lo que sumando a los destacados registros de sobreventa nos podría acabar por confirmar la vuelta de las compras por estos niveles. El primer nivel de resistencia se encuentra en los 4,374 euros. Esperaremos a la superación de estos precios para volver a interesarnos por la compañía.
