«La junta directiva de Twitter, luego de considerar los factores descritos con más detalle, unánimemente determinó que el acuerdo de fusión es aconsejable y la fusión y las demás transacciones contempladas por el acuerdo de fusión son justas, convenientes y en el mejor interés de Twitter y sus accionistas«, ha señalado la empresa en un comunicado remitido a la Comisión del Mercado de Valores (SEC).
Las acciones de Twitter repuntan un 1,91% en Wall Street tras conocerse esta noticia, aunque el descenso en lo que va de año es superior al 37%.
Con todo, el consejero delegado de Tesla sigue echando el freno a la operación. Pese a asegurar hace una semana a los empleados de la red social del pájaro azul que su intención es completar la adquisición de Twitter, al tiempo que avanzaba posibles despidos tras el cierre de la operación, este martes ha señalado que hay “asuntos sin resolver” que deben cerrarse para que se produzca la compra.
El primero y más importante de todos es el que más de cabeza ha traído a Musk y a la junta directiva de Twitter en las últimas semanas: el número de cuentas falsas de la plataforma. “Seguimos esperando una respuesta sobre este asunto, un asunto muy importante”, explicó en una entrevista con Bloomberg en el marco del Foro Económico de Catar. Recientemente, el magnate amenazó formalmente a la compañía que, de no obtener la información que buscaba, retiraría su oferta. La semana pasada, Bret Taylor, presidente independiente del consejo de administración de Twitter, dijo que la dirección de la empresa seguía «comprometida con la transacción en los términos acordados».
Asimismo, otro asunto que preocupa al consejero delegado de SpaceX es la financiación de la deuda que generará esta operación, ya que Musk, que se ha comprometido a pagar 33.500 millones en efectivo y ha conseguido otros 7.100 millones de dólares en compromisos de financiación de parte de diversos inversores. Sin embargo, el resto debe llegar en forma de préstamos bancarios y pese a su condición de persona más rica del mundo, la fortuna de Musk está ligada a las acciones de Tesla, unos títulos que ha utilizado para financiar la operación y garantizar los préstamos y cuya exposición a esta operación no está gustando a los mercados.
Cabe señalar que, en lo que va de año, los títulos del fabricante de vehículos eléctricos se han desplomado por encima del 31% y acumulan un descenso de cerca del 40% desde que se revelara la participación inicial de Musk en Twitter el pasado 4 de abril.
Por último, la operación debe recibir, como decíamos antes, el visto bueno de la junta de accionistas de Twitter y Musk no tiene todas consigo, ya que un buen número de estos demandaron al magnate y a la compañía por la caótica operación. “¿Votarán los accionistas a favor?”, se ha preguntado Musk en la anteriormente mencionada entrevista.