En total, la compañía ha entregado entre marzo y junio un total de 384.122 vehículos, una cifra que se ha quedado por debajo de las 387.000 ventas anticipadas por el consenso de analistas. De estas ventas trimestrales, 373.728 corresponden a los Model 3/Y, mientras que las otras variantes de coches han reportado 10.394 entregas.

Además, la firma ha producido en el segundo trimestre del año 410.244 vehículos, de los que 396.835 corresponden al Model 3/Y.

Estas cifras confirman los malos presagios del primer trimestre del año, en el que la compañía vendió un 13% menos en sus principales mercados mundiales.

Sin embargo, la situación es especialmente dura en Europa, donde las ventas volvieron a caer (-27,9%) en mayo por quinto mes consecutivo. Además, su cuota de mercado en el Viejo Continente también ha bajado al 1,2% desde el 1,8% del mismo periodo de 2024.

En este sentido, los últimos datos ofrecidos por la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) muestran que las nuevas matriculaciones de Tesla en la Unión Europea, el área europea de libre comercio y el Reino Unido, retrocedieron un 27,9% interanual, hasta 13.863 vehículos en mayo.

Ante este retroceso de las venta de vehículos, la compañía apuesta por el desarrollo de otras de sus líneas de negocio, como el energético. A finales de junio, la compañía firmó oficialmente el proyecto para construir su primera central eléctrica de almacenamiento de energía en red, que se ubicará en China.

Con este proyecto, la compañía busca aumentar el peso de su negocio de energía, que es el que más crece actualmente, hasta convertirse en el segundo más importante por volumen de ingresos. Las últimas cuentas de la compañía mostraron un incremento del 67% para esta línea, mientras que la principal, la venta de automóviles, se dejó un 20%.

Por tradeo