Las apuestas deportivas están ganando popularidad en Estados Unidos con muchos sitios que integran criptopagos, pero a medida que aumenta la cantidad de estadounidenses que participan, las voces de preocupación aumentan.
Las apuestas deportivas han sido legales en Estados Unidos desde solo 2018, y la industria joven se ha convertido en un sector de gran crecimiento. En los primeros seis meses de 2022, los ingresos de la industria alcanzaron los 3,040 millones de dólares, en comparación favorable con los 4,300 millones de dólares que gestionó el sector en todo 2021.
En un nuevo impulso para la industria, los ingresos de los proyectos de Morgan Stanley alcanzarán los 8,500 millones de dólares para 2025, pero como sabrán los expertos en cripto, el aumento de los ingresos invariablemente viene acompañado de un mayor escrutinio.
El estado mental número 36
El 1 de agosto, Massachusetts se convirtió en el estado número 36 en legalizar las apuestas deportivas . En todo Estados Unidos, el patrón es de regulación relajada. Massachusetts es el tercer estado en legalizar este año, uniéndose a Maine y Kansas. Se espera que California sea el próximo.
Entre los que se benefician de los cambios se encuentran los anunciantes y las ligas deportivas. Durante la temporada 2020-21, FanDuel, DraftKings y Caesars Entertainment invirtieron mil millones de dólares en ingresos por patrocinio en la NFL. No fueron los únicos jugadores que abrieron sus chequeras. BetMGM, Fox Bet, PointsBet y WynnBet estaban entre el resto.
El marketing agresivo de los juegos de azar para los aficionados al deporte ya está provocando la ira de algunos. A Timothy Fong, codirector del Programa de Estudios de Apuestas de la Universidad de California, le preocupa que la industria esté promoviendo un sueño poco realista.
“En las redes sociales, mostrarán un parlay de 10 dólares que generó 180,000 dólares y dirán ‘este podría ser usted, este es un dinero que cambia la vida’”, dijo Fong a Grid a principios de este mes . “Pero en realidad, este no serás tú”.
Tal como lo ve Fong, este tipo de promoción ofrece a los clientes una gratificación instantánea y minimiza o ignora los peligros que plantea.
Es una posición con la que la comunidad médica parece estar de acuerdo en gran medida. Según la información de la Clínica Mayo, el juego puede provocar una variedad de problemas de salud mental, como depresión y ansiedad, mientras que el juego compulsivo “es una condición grave que puede destruir vidas”.
“Cripto cielo”
Si bien el mercado total de apuestas deportivas ya es enorme, su convergencia con las criptomonedas ofrece beneficios y oportunidades adicionales. Mover monedas fiduciarias tradicionales dentro y fuera de las plataformas de juego no siempre es fácil.
Crypto promete un sistema mucho más eficiente. A principios de este año, el rapero superestrella Drake hizo una apuesta de 1,26 millones de dólares en el Super Bowl con Bitcoin.
Como señaló el experto de la industria Anthony Pompliano en ese momento, “los tiempos de liquidación son más rápidos y el costo es más barato. Bitcoin es superior desde un formato de tecnología”.
Esa es una posición que comparten los expertos de la industria. En una entrevista reciente con TechCrunch, Greg Dean de HotStreak dijo que “ingresar y sacar su dinero es extraordinariamente doloroso porque los pagos están atados a los sistemas de pago heredados”.
Entonces, no es de extrañar que la industria vea un enorme potencial en la blockchain. Aún así, si bien las criptomonedas pueden ofrecer un nuevo y valiente país de las maravillas de las apuestas, también podrían proporcionar a los críticos otro palo con el que vencerlo.
Los usuarios de criptomonedas no son ajenos a la difamación. Los mercados de Darknet como Silk Road son el grano de verdad que, durante años, ha permitido a los críticos exagerar sus vínculos con el mercado internacional de drogas.
Un auge de los juegos de azar en Estados Unidos podría aumentar la exposición y la demanda de criptomonedas, pero al mismo tiempo vincularlas a otro de los males percibidos por la sociedad.
¿Es la asociación con otro vicio social algo que quieren los defensores de las criptomonedas? Si la respuesta es sí o no, es un punto ligeramente discutible. Gracias a la descentralización, es muy poco lo que nadie más que las agencias gubernamentales puede hacer para detener la convergencia.
Expansión y decadencia
Mientras que la industria del juego se está expandiendo en Estados Unidos, el panorama en otros lugares es más complejo. En el Reino Unido, Europa y Australia, la industria es estable o, en algunos casos, se contrae.
En el Reino Unido, el juego ha sido legal desde la década de 1960, pero las regulaciones más estrictas han hecho que el mercado sea más desafiante en los últimos años y algunos sectores ahora están en declive.
Como señala Morgan Stanley , “Si bien hoy en día el entorno regulatorio de Estados Unidos es expansivo, en Australia y Europa es contractivo, lo que destaca el riesgo a largo plazo”.
Si Estados Unidos sigue el modelo del Reino Unido, un área potencial para la aplicación de las normas podría ser la publicidad. Las leyes federales de Estados Unidos han regulado previamente los tipos de lenguaje que podría usar para anunciar casinos, por ejemplo.
Ciertamente es plausible que este tipo de restricciones también puedan aplicarse a los operadores de apuestas deportivas en la plenitud del tiempo.
Por ahora, sin embargo, cualquier cambio restrictivo parecería ser altamente especulativo. Ya sea para beneficio o para mal, las criptomonedas y las apuestas deportivas tienen un largo camino por delante. A dónde los llevará ese camino, sigue siendo un tema de debate.
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